Por Nolan Campos Mi nombre es Nolan Campos, soy médico bachiller, actualmente vivo en San José al igual que mi prometida Laura Cordero, ambos somos de San Juan Bosco, Pérez Zeledón. Yo me mude de New Jersey, EEUU hace 5 años para estudiar medicina en Costa Rica y desde entonces, cada vez que tengo vacaciones nos embarcamos en una pequeña aventura, caminando hasta Uvita.
Hemos hecho este viaje 4 veces, es un recorrido de 14 km y lo completamos en 3 horas y media. Siempre que hacemos esta caminata la vamos monitorizando con una app llamada Runtastic, esta aplicación nos permite ver los kilómetros recorridos, calorías quemadas y elevación, además de tomar fotografías para que nuestros amigos nos puedan seguir en vivo durante toda la caminata. Durante el 80% del recorrido hay buena recepción de teléfono celular, la topografía es excepcional, sin obstáculos, casi en línea recta y sin desvíos. El camino es un poco solitario, no hay casas durante los primeros 7 km.
El camino se torna difícil al iniciar la Calle Bejuco debido a que hay mucha piedra suelta y las cuestas son muy empinadas. El viaje vale la pena, el panorama es espectacular, cuando se está arriba se puede ver el pacífico, el tómbolo de la ballena y siempre tenemos agua fresca de las nacientes. En el trayecto, siempre pasamos por la famosa catarata de Uvita, la cual aún no hemos visitado, sólo la hemos visto en una película (AE – Altos Éxodús) que se filmó ahí hace un año. Una vez que llegamos a Bahía, nos vamos directo a la playa Chaman a bañarnos y descansar. La gente de Bahía no puede creer que venimos caminando desde “la cima de la montaña que están viendo”, cuando les mostramos las fotos se quedan sorprendidos. Es increíble pensar que sólo unas horas antes estábamos en una provincia distinta, la cual cruzamos de un extremo a otro. Esa ruta es geográficamente interesante y el panorama es tan espectacular que no se puede describir, es necesario vivir la experiencia personalmente.